La economía portuguesa ha sido una de las más afectadas por la pandemia mundial que ha sacudido al mundo en los últimos años. Sin embargo, hay buenas noticias en el horizonte. Según la agencia de calificación de riesgo Moody’s, se espera que la economía portuguesa crezca un 1,9% en 2024 y acelere aún más para alcanzar un crecimiento del 2,2% en 2025.
Esta proyección es una señal alentadora para el futuro de Portugal, ya que muestra una recuperación económica sostenida después de un período de incertidumbre y desafíos. A pesar de los obstáculos que ha enfrentado, Portugal ha demostrado su resiliencia y capacidad para adaptarse a las circunstancias cambiantes.
La estimación de Moody’s se basa en varios factores clave que impulsarán el crecimiento económico en los próximos años. Uno de ellos es el aumento de la inversión extranjera directa, que se espera que aumente en un 5% anual en promedio. Esto se debe a la confianza de los inversores en la economía portuguesa y su potencial de crecimiento a largo plazo.
Además, se espera que el sector turístico, uno de los pilares de la economía portuguesa, se recupere gradualmente a medida que se levanten las restricciones de viaje y se reanuden las actividades turísticas. Esto tendrá un impacto positivo en la economía en general, ya que el turismo representa alrededor del 15% del PIB de Portugal.
Otro factor importante es el aumento de las exportaciones, especialmente en el sector de la tecnología y la innovación. Portugal ha demostrado su capacidad para adaptarse a la economía digital y ha sido reconocido como uno de los países más innovadores de Europa. Se espera que esta tendencia continúe en los próximos años, lo que impulsará aún más el crecimiento económico.
Además, el gobierno portugués ha implementado medidas para estimular la economía y apoyar a las empresas y trabajadores afectados por la pandemia. Estas medidas incluyen programas de ayuda financiera, reducción de impuestos y apoyo a la creación de empleo. Todo esto contribuirá a una recuperación económica más rápida y sólida.
La proyección de Moody’s también tiene en cuenta la estabilidad política y social de Portugal, que es un factor clave para atraer inversiones y fomentar un entorno empresarial favorable. El país ha demostrado su estabilidad y capacidad para superar desafíos en el pasado, lo que lo convierte en un destino atractivo para los inversores.
Esta estimación positiva de la economía portuguesa también es una señal de confianza en la Unión Europea y su capacidad para superar la crisis económica causada por la pandemia. Portugal ha sido uno de los países más afectados por la crisis, pero también ha sido uno de los primeros en implementar medidas para mitigar su impacto. Esto demuestra su compromiso con la estabilidad y el crecimiento económico en la región.
En resumen, la proyección de Moody’s sobre el crecimiento económico de Portugal en los próximos años es una noticia alentadora para el país y sus ciudadanos. Muestra que Portugal está en el camino correcto hacia la recuperación y el crecimiento sostenible. Sin duda, habrá desafíos en el camino, pero con una economía sólida y un gobierno comprometido, Portugal está bien posicionado para superarlos y alcanzar un futuro próspero.